lunes, 3 de junio de 2013

CONCLUCION "EL NIÑO DE LA PIJAMA DE RAYAS"




Me parece un libro muy entretenido y original. Además al ser protagonista un niño de nueve años que no sabe lo que está sucediendo a su alrededor te llega más ya que tú sí que sabes qué es lo que ocurre y que es lo que le puede llegar a suceder si se descubre lo que está haciendo. Bruno que vive con la inocencia propia de un niño de 9 años con sus amigos en Berlín y lo único que le importa es pasárselo bien hasta que tiene que marcharse debido al trabajo de su padre.
Gretel y Bruno que son hermanos y no hacen más que enfadarse y fastidiarse el un al otro. Gretel es la hermana mayor y Bruno no entiende las cosas que hace.
Shmuel, el vive dentro de un campo de concentración pero nunca se queja de ello, sin embargo Bruno se queja de todo sin saber en qué condiciones vive su amigo. Si lo supiera no se quejaría tanto.
El padre de Bruno es uno de los comandantes que dirigen el campo de concentración donde se encuentra el amigo de su hijo, quien no sabe nada debido a su edad.
Shmuel y Bruno se hacen amigos inseparables, todos los días se tiran hablando mucho tiempo.

Es un libro que me ha impactado. Al principio, como todos, es un poco aburrido porque te describe el entorno, los personajes, etc., pero a partir de la página setenta empieza a entusiasmarme, es algo raro que el autor haya elegido este final para una historia como la de Bruno, a mi el final de la historia no me ha gustado nada.

 Por lo demás el libro está muy bien, describe perfectamente como era el pensamiento por aquella época y como el pensamiento del niño no es el mismo que el de los demás por qué no comprende lo que sucede a su alrededor. La parte del libro que más me emociono fue cuando después de que Bruno negase que Shmuel fuera su amigo, una semana más tarde Shmuel le perdonase y se dieran la mano por primera vez. Para finalizar debo decir que este libro es muy recomendable para cualquier persona que desconozca aquella época. Yo no sabía mucho sobre los campos de concentración y desconocía muchos lugares como Auschwitz.



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